La evidencia científica muestra que la meditación mejora el dolor, la ansiedad y la depresión

Investigación

Según una revisión sistemática realizada por Goyal y cols (2014) tras revisar 47 estudios experimentales y realizar un análisis estadístico han concluido que un programa de meditación mejora la ansiedad, la depresión y el dolor.

Muchas personas meditan para reducir el estrés psicológico y los problemas de salud relacionados con el estrés. Recientemente se ha publicado una revisión sistemática en la revista  JAMA internal Medicine para que los profesionales puedan asesorar adecuadamente a las personas sobre los beneficios que pueden ofrecer los  programas de mindfulness y meditación teniendo en cuenta la evidencia científica.

El estudio se propuso determinar la eficacia que tenían los diferentes  programas de meditación y mindfulness  para mejorar los resultados en salud relacionados con el estrés (ansiedad, depresión, estrés / angustia, el estado de ánimo positivo, la calidad de vida relacionada con la salud mental, el abuso de sustancias, los hábitos de alimentación, el sueño, el dolor y el peso) en diversos poblaciones clínicas adultas.

Para ello se identificaron ensayos clínicos aleatorios con controles activos y evitar el efecto placebo hasta noviembre de 2012 en diferentes bases de datos que recopilan estudios científicos. Dos revisores independientes seleccionaron cada artículo y extrajeron los datos obtenidos. Se calificó la solidez de las evidencia utilizando 4 dominios (riesgo de sesgo, precisión, franqueza y consistencia) y se determinó la magnitud y la dirección del efecto mediante el cálculo de la diferencia relativa entre los grupos en el cambio desde la línea base. Cuando fue posible, se realizó un metanálisis mediante las diferencias de medias estandarizadas para obtener estimaciones agregadas de tamaño del efecto con intervalos de confianza del 95%.

Después de revisar 18 753 citas, se incluyeron 47 ensayos con 3515 participantes. Los principales resultados que se obtuvieron es que los programas de meditación y mindfulness mostraba evidencias  moderadas en la mejora de la ansiedad (tamaño del efecto, 0,38 [IC del 95%, 0,12-0,64] a las 8 semanas y 0,22 [0,02 hasta 0,43] a los 3-6 meses), depresión (0,30 [0,00 a 0,59] a las 8 semana y 0,23 [0,05-,42] a los 3-6 meses) y dolor (0,33 [0,03-0,62]) y grado menor de evidencia el estrés y la calidad de vida relacionada con la salud. 

También se obtuvieron evidencias insuficientes sobre el efecto que los programas de meditación podían tener  en el estado de ánimo positivo, la atención, el abuso de sustancias, los hábitos alimenticios, el sueño y el peso. No se encontraron evidencia de que los programas de meditación fuesen mejores que otros tratamientos tratamiento como los medicamentos, el ejercicio u otras terapias de carácter cognitivo.