¿Te gusta el chocolate? Pues no eres la única persona en el planeta. El chocolate es uno de los alimentos más codiciados del mundo debido a su sabor combinado, agradables efectos fisiológicos y asociación pasada con eventos sociales agradables y recuerdos juveniles. También se dice que tiene un efecto positivo en el estado de ánimo que nos ayudan a aumentar nuestros niveles de serotonina. Meier et al. [Appetite] exploraron la capacidad del chocolate para inducir un estado de ánimo agradable y el grado en que mindfulness durante la comida influye en su posible efecto sobre el estado de ánimo.
Los investigadores reclutaron a 258 jóvenes estudiantes universitarios (65% mujeres) que fueron asignados al azar a una de las cuatro condiciones experimentales: una intervención que suponía comer con mifulness chocolate, una intervención que suponía comer con mifulness crackers, una intervención que suponía comer chocolate sin mindfulness y una intervención que suponía comer crackers sin mindfulness. A los participantes se les dieron cinco trozos de chocolate o cinco crackers. Antes de comer, los participantes escucharon una grabación de audio de las instrucciones de atención plena similares a las utilizadas en un curso de MBSR cuando se realiza el ejercicio de la pasa. A los grupos control se les dijo que tomasen una onza de chocolate o un craker a la vez.
Los participantes completaron varios cuestionarios autoinformados de estado de ánimo tanto inmediatamente antes como después de comer el chocolate o los crackers. También completaron una escala de gustos alimenticios inmediatamente después de comer y calificaron el grado de la atención plena mientras comían usando la Escala de Mindfulness de Toronto (TMS).
Los participantes en las intervenciones de mindfulness marcaron significativamente más alto en el TMS, lo que demuestra que la manipulación experimental efectivamente inducido un estado consciente.
Los participantes en las condiciones de mindfulness disfrutaron de su alimento significativamente más que aquellos en las intervenciones sin mindfulness , y los que comieron el chocolate disfrutaron su comida significativamente más que los que comieron los crakers. Los participantes en que fueron capacitados con intervenciones de mindfulness también tuvieron incrementos significativamente mayores en el estado de ánimo positivo después de comer que los que estaban no tuvieron una intervención con mindfulness, y los que comieron chocolate tuvieron aumentos más grandes en el estado de ánimo positivo que aquellos que comieron crakers.
También hubo un efecto de interacción significativo entre la atención plena y el tipo de alimento: los consumidores de chocolate que lo hicieron con mindfulness tuvieron un aumento significativamente mayor en su estado de ánimo positivo que los participantes en las otras tres intervenciones. Mindfulness también redujo significativamente los niveles de estado de ánimo negativo. El estudio muestra que comer chocolate mejora el estado de ánimo de uno, y que el consumo consciente del chocolate lo hace aún más. Sugiere que aprender a saborear las experiencias positivas puede ser una ruta importante para mejorar el disfrute de la vida y el bienestar emocional.